viernes, 19 de abril de 2019

NUESTROS ESPEJOS

Lo que vemos afuera es lo que podemos ver dentro de nosotros...

Si no somos capaces de vernos a nosotros mismos, es imposible que podamos ver a los demás. Desde ahí, todo lo que vemos en los demás, no les pertenece a ellos sino que existe oculto en nuestro interior.

Cuando llevamos años sin apenas escucharnos, no podemos reconocernos y, por supuesto, mucho menos cuidarnos. En ese estado, no resulta posible poder atender a los demás porque no los vemos. Dicho de otro modo, cuando sentimos que no somos capaces de interesarnos por las personas, de preocuparnos por ellas de verdad, significa que no podemos siquiera vernos a nosotros mismos.

Poca cosa buena puede salir de ese estado de pérdida y confusión...

Cuando, tras elegir conscientemente realizar el camino de vuelta a uno mismo, volvemos a reconocernos, podemos parar... podemos sentirnos respirar... podemos reconocernos dentro de nuestros límites corporales... Podemos, desde ahí, mirar afuera, desde sentirnos un ser completo e integrado... Sólo desde ahí, podemos ver al otro. Únicamente desde ahí, podemos sentirlo y interesarnos por él. Dicho de otro modo, si somos capaces de preocuparnos de verdad por los demás y cuidarlos, es porque nos estamos atendiendo y cuidando.

Todo lo que vemos afuera son indicaciones de cómo estamos actuando con nosotros mismos. Sólo eso y todo eso...



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Y además...

NUESTROS ESPEJOS

Lo que vemos afuera es lo que podemos ver dentro de nosotros... Si no somos capaces de vernos a nosotros mismos, es imposible que podamos ...

Otros artículos interesantes